martes, 29 de marzo de 2016

El amor en otro idioma

Por: Gabriela Kawas

Todos sabemos que la comunicación de pareja no siempre es fácil y muchas veces se presta a diversos malos entendidos. A veces decimos una cosa que  no era exactamente lo que queríamos decir y encima de todo, la otra persona entiende otra cosa totalmente diferente. 

Ahora, si esto sucede con el mismo idioma y con la misma cultura, imagínense lo que esto pasa cuando la relación de pareja se maneja en un idioma que no es el tuyo y que tampoco es el de tu pareja!

Mi alemán mejora cada vez más, pero el día que aprenda a discutir o incluso a pelear en alemán sabré que habré alcanzado el doctorado en esta lengua. Cuando se discute, las cosas salen del corazón, poco tiempo hay para pensar y mucho menos para traducir! 

Siempre utilizo este ejemplo porque me parece sumamente ilustrativo particularmente para los mexicanos. Si yo menciono la palabra "lanchero" ¿en qué piensas? Bueno… creo saberlo; podría asegurar que muy probablemente estamos compartiendo la misma imagen mental. Ese morenazo de fuego con rayos oxigenados en el pelo a medio largo, que lleva cargando una tabla de "surf" ofreciéndote un descuento para que le rentes una palapa, es un viejo conocido tuyo y mío.
Hasta aquí todo bien... el problema viene si yo a mi marido (imaginando que hablara un perfecto español) le dijera: "después de estar 4 horas bajo el sol me quedó la piel de lanchero"...   Sinceramente no me va a entender pero para nada. A lo mejor en su mente se imagina a un hombre vestido de marinero manejando un yate en las islas griegas elegantemente diciendo "todo va viento en popa"; pensando que estoy muy satisfecha con mi bronceado mediterráneo. 

Este ejemplo sirve amigos míos para ilustrar lo difícil que es vivir en un idioma que no es ni el de mi marido ni tampoco el mío y que en las discusiones a veces uno evoca a retóricas culturales, a lugares comunes que son solo comunes para nosotros. Evidentemente él también utiliza expresiones, gestos y todo lo que implica el lenguaje no verbal pero en SU idioma.

A veces puede ser frustrante no poder compartir por ejemplo los memes del Chapo y Kate o no poder explicar una idea compleja con un simple refrán. El otro día mientras hablábamos sobre un tema, venía al caso una frase típica mexicana: "mucho ruido y pocas nueces".  Cuando se lo dije en alemán ni yo me entendí, así que terminé diciendo "a lot of noise but just a few nuts". O sea, se me quedó viendo y se fue.
En estos casos solo me queda reírme yo misma sobre lo que pasa por mi mente y sobre todo por la desesperación que a veces siento de no poder compartir algunas ideas con la persona que más amo.

Sin embargo, no todo es malo... al final la cosa es increíblemente gratificante y enriquecedora y aunque la tenemos mas difícil que la mayoría de las parejas del mundo al tener que poner triple esfuerzo para entendernos de la mejor manera posible; es un trabajo increíble para la tolerancia, la paciencia, el amor incondicional, el respeto, la apertura de mente, de límites y de fronteras. La recompensa es el crear constantemente códigos de comunicación propios y poner un esfuerzo extra para conocernos lo suficiente para así poder entendernos a pesar de las barreras del lenguaje. 

Tener 3 idiomas en casa te abre la opción de encontrar siempre una palabra que suena mejor, que encaja más con lo que quieres decir, que es más bonita, que define todo lo que en los otros idiomas quizás explicaríamos con una frase más larga o compleja y sobre todo, nos enseña a pensar diferente.  

Por suerte tenemos una cantidad significativa de amigos en las mismas circunstancias y compartir anécdotas sobre malos entendidos a la hora de querer expresar algo en otro idioma hace que todo merezca la pena…. pueden realmente ser historias divertidísimas. Si tienes alguna experiencia de este tipo por favor compártela en los comentarios para que todas y todos podamos reírnos un rato :).

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